Visitamos primero el Teatro Romano y posteriormente la Alcazaba, donde se nos explicó la historia de ambos monumentos.
El Teatro Romano de Málaga fue mandado a edificar durante el reinado del emperador Augusto en el siglo I d.C.
Desde el siglo I hasta el siglo III, los romanos utilizaron este teatro para representar las tragedias y comedias de los autores de la época.
El teatro romano consta de tres partes diferenciadas: la orchestra, el escenario y el graderío, de unos 16 metros de altura. Esta última parte ha conservado gran parte de su estructura original, ya que los romanos utilizaron la pendiente de la ladera para asentar las gradas.
El inicio de la construcción de la Alcazaba puede enmarcarse entre el 1057 y 1063 d.C. bajo el mandato del rey de taifas bereber Badis, con su centro de poder en Granada.
Pero su apogeo árabe llega en 1279 tras la conquista nazarí con Muhammad II Ben al-Ahmar.
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